Pajarona

viernes, 14 de noviembre de 2008

De nadie

Todos los días me acuerdo de ti. Tu precencia ya hace que se me humedezca la vista. Podría pasarme la vida pensando en cómo sería la que llevo, influenciada por tu compañia. Y siempre llego a que estaríamos talvez viviendo juntas, tu trabajando y yo estudiando, llevando una vida muy loca y relajada, chistosa a más no poder. Serías mi mejor amiga, me derribarías en los titanes de las gracias y talvez yo en las imitaciones. Nos veo en Santiago. En vez de haber tomado el nombre de ciudad maldita, habria sido el refugio de nuestra hermandad. Creo que tendrías 30 ahora. Talvez vivimos juntas y ya tienes una familia, y me dejaste sola en el departamento. O te cambiaste a una casa y yo vivo contigo. Tendría sobrinos. ¿Sabes que nunca tendré sobrinos propios? Me dan unos celos incontrolables cuando las personas hablan tan deliberadamente de sus sobrinos, de la junta con los hermanos, de sus tíos. Yo seré la tía de nadie. Me da tanto miedo seguir creciendo. Quiero irme del país cuando ya esté más vieja. Si me asusta el tiempo que pasa vertiginosamente sobre mi numerosa familia que cada vez se está poniendo más fome, imagínate una con un solo miembro: yo. Tendré que formar parte de la nueva era sin familia, de los robocops sin raíces. Migrar y valerme sola, aún asi quiero un hermano. En realidad te quiero a ti. Puta ceci, yo se que hay que ser positivos y aceptar las situaciones pero me tocó una bien conchasumadre. Aunque viéndolo alejadamente, todas las personas viven con algun dolor en ellas . Y éste es parte de uno más grande y de una masa en órbita enorme de dolor, que cada vez que te recuerdo me devuelve tu persona y se abre una herida que nunca sanará. Si es solo tu nombre y me caen las lágrimas. Qué duro debe ser aun para nuestros papás. El nari está enfermando y mi abuela, cada día más chalada, todo debido a tu partida. Debería odiarte, pero en realidad me siento culpable. En repercución social, si me fuera para siempre no habrían tantos afectados como pasó contigo. Eras tan genial, todos te querían.
Hermana ya me acerco a tu edad y siento que nos parecemos mucho, solo que yo soy algo mas intro. He llegado a desear las cosas más idiotas a cambio de que vuelvas. Entre esas ser una obesa morbida y tú estando conmigo, o dejar todos los placeres culinarios de la tierra.
A menudo sueño que vuelves o que nunca te fuiste. El más nítido de ellos fue cuando aparecías en el antejardín de la casa con una mochila gigante y pinta hippie. Te habias ido a mochilear y volvías. Yo te abrazaba fuerte y tu me decías que qué onda. Era bien pesá cuando chica, me arrepiento en serio, aunque uno nunca sabe que ira a suceder con quienes te rodean. Hasta hace poco tiempo asumí que ya no volverías, no sé qué tipo de esperanza me mantenía tan tranquila. Te esperé hermana, incluso siempre he soñado en que te me aparescas como la gente que dice que se le aparecen fantasmas. Me pregunto por qué a mi no.

No hay comentarios: