Chicos, escuchen esta canción y luego escríban todo lo que se les venga a la mente, sin importar la redacción. Escriban lo que se les ocurra, que fluya. Cierren sus ojos, y aplaudan cuando terminen. No más de un párrafo.
Mientras estoy en un bar bebiendo en los cincuenta, me transporto a la casa de la abuela de otra persona escuchando una radio porque no tiene tele con cable. Que asqueroso el teclear de todos frenéticamente, para intentar agarrar las ideas que en realidad ya se fueron. Veo a una cantante pop en la tele cantando exageradamente con esos tonos que solo quieren hacer lucir tu voz en vez de transmitir algo realmente genial. En mi impaciencia abro un ojo y miro a otra compañera, me la imagino imaginando. ¿Un aplauso?
No puedo escribir sintiendo que soy parte de esta locura teclear. Tendré que acostumbrarme y seguir. Del bar, el merengue o ritmo jugoso, la tipa que cantaba y los trompetistas del escenario se ven tragados por los audífonos de la chica que va en la micro. Con esta melodía que la hace sentir tan bien, se preocupa de ponerle música a lo que mira. Los arbóles, los autos mas pequeños y la gente caminando. Realmente es una locura observarlos a todos como seres pequeñitos moviéndose por la ciudad sin pensar que están siendo constantemente observados.
¿Tengo que terminar? Podría seguir un poco más. Se me apareció cristina aguilera, un cigarro largo, un lugar medio colorado. Ya tengo el párrafo, al diablo con mi imaginación.
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